Esta es una canción
singular, no solo porque fue un tema romántico muy popular de los 70 sino
porque fue grabada por Nino Bravo, famoso cantor español muerto en un accidente
de tránsito a los 28 años. Además, este tema es especial porque su compositor, Augusto
Algueró, la dedicó expresamente a una mujer, Noelia Afonso, Mis España 1968,
quien despertó en él un interés especial, pero que no pudo cristalizar porque
ella ya estaba comprometida con otro hombre que iba a ser su marido, en tanto
que Augusto Algueró era el esposo de la famosa artista Carmen Sevilla.
La canción empieza
con la melodía principal tocada con el piano y una introducción hablada, “Hay
una chica que es igual pero distinta a las demás”, que personifica a una chica
sencilla, natural, es decir, común y corriente. Pero a la vez diferente a cualquier
otra. Esa diferencia, ¿Dónde se halla? No en el exterior de la chica porque es
como todas. Esa distinción está en algo que no se ve, en su
interior, en su personalidad, su carácter, su humor, temperamento. Ese interior
es conocido por quien expresa esa apreciación. Luego dice “La veo todas las
noches por la playa pasear y no sé de dónde viene y no sé a dónde va”. Este
verso describe un lugar azaroso y oscuro y nos crea imágenes enigmáticas pues, es
un misterio no saber cómo aparece y desaparece y que viene haciendo allí. Luego
nos cuenta que “hace tiempo que sueño con ella y solo sé que se llama Noelia, hace
tiempo que vivo por ella y solo sé que se llama Noelia”. Estos versos nos dicen
que hay una fijación subjetiva por esa chica, a quien no conoce que le hace
repetir enajenado: “Noelia, Noelia, Noelia, Noelia, Noelia, Noelia, Noelia,
Noelia, Noelia, Noelia”.
“Yo quiero
hablarle de mi amor, pero ella da la espalda y se va, parece que me va a llamar
y luego huye sin hablar”, nos indica a una chica que no dice una palabra, que,
aunque le tienta a entablar una conversación, al final rehúsa hacerla.
“Por la noche la
busco en la playa, y en el silencio yo grito ¡Noelia! En el paroxismo de su
obsesión, el enamorado grita su nombre y promete esperarla:
“No sé qué hará,
ni si vendrá, más yo la espero”.
En resumen esta canción
expresa un amor romántico y platónico que se tiene por una persona a quien se
ha visto fugazmente, por la playa, por un parque, en la calle o en un ómnibus,
a quien nunca se ha hablado o nunca se hablará y que a
pesar de cualquier circunstancia, sentimos que le profesamos un sentimiento
especial.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario