“I’m a loser” o “Soy un perdedor” fue compuestapor John Lennon y fue el inicio del fin del
periodo cuando Lennon solía componer canciones juntamente con Paul McCarthy.
Fue lanzada en el álbum “Beatle for sale” en 1964. Lennon consideraba a esta canción
como la mejor que había compuesta en la primera etapa de los Beatles.
El video de la presentación fue grabado en los
estudios Granville de Londres y retransmitido en la televisión estadounidense
el 7 de octubre de 1964. El video exhibe distorsiones en el audio que se hizo
frecuente en las giras que hacían hasta que en el concierto de 1966, en Japón,
ellos mismos se dieron cuenta de la falta de calidad del sonido de sus
presentaciones. Por ello el grupo más famoso de la historia ya no volvería a
llevar a cabo ninguna gira más.
Letra
Los Beatles pasaron por varias etapas musicales. En la
primera expresaron las vicisitudes de los adolescentes, sus enamoramientos, sus
rompimientos, sus penas, alegrías y tristezas con un acompañamiento musical
sencillo, generalmente de cuatro o cinco acordes.
Lo singular de “I’m a loser” está en la dicotomía de
la canción, entre la letra y la música. Mientras la letra expresa tristeza, pesar
y fracaso la música, por el contrario, es rítmica, alegre y triunfante. Esta
dualidad y antagonismo esta acentuada por la interpretación Lennon. Se le ve fresco,
suelto y a veces sonriendo. Y justo en el coro, cuando dice “I’m a loser” es
cuando más alegre, movida e intensa suena la canción.
Como no nos puede gustar y causar simpatía un perdedor
cuando canta y celebra su derrota de la manera como lo hace John Lennon.
“Lanza perfume” fue escrita y grabada en 1980 por Rita Lee,
multi-instrumentista, actriz y activista. Es conocida en Brasil como “La reina
del rock”.
La canción alcanzó un record de ventas en varios países de América Latina y Europa.
Letra
“Lanza perfume” es una canción optimista e idealista que pretende acabar
con las guerras lanzando perfume, una idea loca y cándida que gusto a millones
en los 80.
“No te olvidare” es una canción compuesta y grabada
por Gloria Stefan en 1988 con su grupo “Miami Sound Machine”. Este fue el primer éxito número uno en los Estados Unidos. Fue regrabada tres
veces, en inglés, en español y spanglish.
Letra
La canción es acerca de la imposibilidad de dejar ir
un amor y el trastorno emocionalde una relación
que acaba. En 1988, Gloria Estefan se había casado con el fundador de Miami
Sound Machine, Emilio Estefan Jr. Los fanáticos se preguntaron cómo la cantante
supuestamente felizmente casada podía escribir una balada tan desgarradora
sobre un amor que terminó mal. Ella lo explicó a la revista Billboard en 1988:
"Creo que es ahí donde el artista usa su licencia
creativa. Pude haber experimentado estos sentimientos un tiempo atrás o quizás
indirectamente a través de otra persona, tal vez amigos que pasaron por algo
similar. Creo que el artista siempre escribe desde dentro, desde el alma, e
incluso si no lo experimentase a sí mismo. Tiene que sentir cómo se sentirían
las personas en esta situación, y cómo lo dirían. Yo siempre trato de escribir
muy conversacionalmente y pienso como alguien que podría decírselo alguien más
y luego trato de hacerlo más musical”.
"Constant Craving" o “Deseo constante” fue escrita por k.d. Lang
y Ben Mink y grabada en 1992.
En una entrevista que le hizo una publicación budista “The Shambala Sun”,
K.d. Lang, quien es una devota budista, dijo que la canción se refiere al
samsara. Cuenta Lang que ella no lo entendía pero que luego se le hizo claro.
Es la suma del deseo humano. Pues todos tenemos el corazón roto, todos estamos
nerviosos, todos somos vulnerables, pero al final del día, todo ha sido un
deseo constante
Samsara es la rueda del ciclo de la vida. Literalmente significa
“vagabundear por el sufrimiento”. Empieza con el nacimiento del ser, comprende
su vida y su muerte, para luego renacer en otro. El renacimiento depende de qué
Karma posee el individuo, considerando la esencia de sus acciones en esta y
otras vidas. Este renacimiento ocurre una y otra vez, innumerables veces, en
seres diferentes, dándonos la oportunidad de experimentar, vivir y mejorar
espiritualmente.
La liberación del Samsara ocurre sólo si se llega a la iluminación. Los
humanos son capaces de liberarse de este ciclo dado que son una de las
existencias más espirituales y desarrolladas. El camino continúa con el ser
iluminado (Buda) compadeciéndose del resto de los seres sintientes, y
guiándolos por el camino hacia la iluminación.
Los versos de la canción son profundamente poéticos y evocativos. La descripción del espíritu
que mora debajo de la piel es excepcional. De una manera sublime introduce en
la canción, el tema de la verdad que constantemente atrae al ser humano. Y es
esperanzador que declare que en la juventud es donde reside la sabiduría.
“Nena, ahora que te he encontrado, no puedo dejarte ir. Construí mi
mundo alrededor tuyo, te necesito nena, aunque, no me necesites.
Nena, desde que nos conocimos, sabía en este corazón mío, que el amor que teníamos, no podía ser malo, que
hice bien, y esperé. Toda mi vida he esperado por alguien, que me diera amor
como tú. Ahora me dice que me quieres dejar, Cariño, no puedo dejar que hagas
eso”.
Escuche esta canción en el verano de 1968 cuando las vacaciones del
colegio duraban más de tres meses. Nos acompañaba a Manuel y a mi camino a la playa de La
Herradura, todos los días de la semana. Solíamos andar por el borde del
parapeto que protegía la pista que vadeaba el acantilado que conducía a la
playa, desde El Regatas a La Herradura. Éramos adolescentes de apenas trece años,
cuando la vida era como el mar, insondable, infinita y misteriosa. Pero
nosotros estábamos ya mojándonos los pies descalzos en su playa. Creíamos que sabíamos
suficiente de la vida. Lo cual era que… ¡queríamos
ser felices! Y la vida era simple, hacer lo que nos complacía y nos alegrara.
Ir a la playa era una de las cosas que nos deleitaba. Tenía el sol que
nos bronceaba, el mar que nos bañaba y chicas a quien mirar. Nos gustaba retar a
la corriente de las aguas de La Herradura con nuestros alfeñiques cuerpos. La
verdad es que no conseguíamos ligar ninguna chica en todo el verano pero
siempre regresábamos por un poco más decepción cada mañana, sin rencor.
Mi amigo Manuel era un tipo risueño por naturaleza, pelotero y fiestero
como todos. Pateando la pelota en las tardes y bailando en las fiestas de los sábados
consumíamos lo poco de energía que nuestro metabolismo nos dejaba. Y necesitábamos
más para cirear a las chicas que deseaban ser cireadas.
En el barrio de Manuel las parejas estaban establecidas de facto, aunque
no lo fueran, más que todo por consenso, básicamente llevado a cabo por las
chicas. Entonces se sabía que chico tenía que estar con que chica. Y ese
acuerdo no se podía alterar ni con el pensamiento. A Manuel le habían asignado
una morenita, graciosa y bonita con quien él no estaba muy entusiasmado. Nunca
mostró un descontento, siempre lucia risueño
y siempre caballeroso. Las demás chicas alentaban que se concretara esa relación
pero Manuel siempre la mantuvo como una muy bonita y linda amistad.
A mí me habían otorgado a una chica simpática, bien formada y más alta
que yo. Pero yo sentía atracción por la
hermana de Manuel, Patricia. Me gustaba verla, hablarle. Era menuda, chiquita,
pelo castaño y voz ronquita. A ella la habían “comprometido” con un chico
petulante y callado. Me caía mal, por su propia culpa. Pensé por un momento que
tendríamos que dirimir ese problema a golpes. Lo fatal era que ese acuerdo no podía
ser trasgredido ni por golpes, ni por nadie y ni por nada en este mundo.
Me alejé un tiempo del barrio de Manuel. Volví
a los meses y lo busqué. Una vecina
al verme tocar la puerta se me acerca y me dice que Manuel ya no vive allí, que
había muerto y que su familia se había mudado. No entendí lo que me dijo o no
lo quise entender o no lo podía entender. No era posible que un chico muera
tan, tan joven. Por primera vez conocí la muerte de una persona que no debía morir,
porque era parte de mi mundo, de mi generación, de lo que me pertenecía, de mi
juventud, de la juventud que está hecha para vivir, pues no se muere en la
juventud, sino más adelante, en la vejez, como se morían mis abuelos y los tíos.
Así fue que Manuel pasó a ser un muerto
de mi juventud, a mi pesar… con un profundo pesar.
Más la melodía de esta canción agita los recuerdos dulces del pasado.
La canción “Back for good” o “Vuelve para siempre” fue grabada por “Take
That”, una banda británica en 1995 en su larga duración “Nobody Else”. La canción
fue creada por la voz principal Gary Barlow. Fue número uno en Inglaterra y en
31 países alrededor del mundo.