domingo, 7 de mayo de 2017

Cecilia XXXI


-Seguramente y para entenderte mejor deberías decir que ya no sientes a tu marido como tu esposo y quieres romper el compromiso de fidelidad.
-¿Si digo que no lo amo más estoy siendo honesta? He tratado de llevar una vida normal pensando que quizás sería mejor para mí y para mi familia pero ya no.
-¿Ya lo decidiste?
-Sí, ya lo decidí. He reflexionado, he tomado mi tiempo y lo decidí. Pero no es una fácil decisión ni tampoco llevarla a cabo. Debería ser más fácil terminar una relación errada en estos tiempos modernos y más cuando se quiere ser honesta. No entiendo a este mundo.
-En muchas cosas se ha avanzado, pero no en el amor, nos hemos estancado.
-¿O de repente hemos ido para atrás?
-Te contaré que hace mucho tiempo había tal libertad que la mujer podía tener amores con quien quisiera sin ser vista como una ramera y ser respetada como cualquier hombre. Si ella estaba con un hombre y no quería ser importunada, bastaba que el susodicho pusiera su lanza en la entrada de su casa. El concepto de amor era diferente, más sano, más alegre, natural y divertido. El de ahora es posesivo, controlador, dominante, individual y complejo por las diversas normas que se deben seguir. Además el estado usa el amor de pareja y su mecanismo como un recurso para dominar la sociedad y a sus individuos, como cuando tapa o descubre el cuerpo de la mujer para, sugerentemente, hacer que los hombres se conduzcan de cierta manera en la sociedad.
-No es extraño entonces que nosotras las mujeres encontremos muchos problemas en nuestra vida sentimental.
-Pero cuéntame, ¿crees que tu esposo aceptara con tranquilidad la separación?
-Es una incógnita. Él se muestra mesurado y pacifico pero es un volcán por dentro. Siempre ha tenido la capacidad de liberar su presión. Pero hay algo que ha hecho últimamente que es inusual en él. Ha comprado una pistola.
-¿Una pistola?
-Si. Siempre había estado opuesto a las armas de fuego pero hace quince días compró una. Yo le pregunté porque y me dijo que el ver la cantidad de asaltos y robos le ha hecho cambiar de idea. Dice que es solo para auto defensa.
-En cierta manera parece entendible su motivo considerando el grado de inseguridad en que vivimos. De todas maneras deben de establecer un procedimiento para mantener bajo extremo cuidado esa arma considerando que hay chicos en la casa.
-Lo hemos discutido mucho y dice que solo la va llevar cuando tenga que trabajar hasta tarde. En casa la tendrá bajo llave siempre y solo en la noche la tendrá disponible para seguridad. Dice que si escuchara algún ruido  dispararía un tiro al aire para asustar a los ladrones.
-Parece bien pensado. Te quería preguntar otra cosa. ¿Has conocido a alguien que esté interesado por ti?
-No ni quiero conocer a nadie.
-¿Sigues pensando en mi hermano? Te pregunto eso porque si vas a estar libre de compromisos podrías retomar una amistad con él.
-No, he dejado de pensar en tu hermano como una ilusión, lo recuerdo como una experiencia de juventud. No he pensado en comunicarme con tu hermano y si lo hiciera, seria por pura casualidad.
-Tú sabes que yo no puedo transmitirle ninguna conversación que tengo contigo, aunque así lo quisiera.
-Yo siempre confió en ti y no se me ha cruzado por la mente que tú fueras a compartir cualquier cosa que te comente aquí en tu casa.
-Gracias y espero que todo te vaya bien.
-Gracias a ti por ser tan paciente y ayudarme tanto.

                                                  **********



No hay comentarios.:

Publicar un comentario