martes, 25 de octubre de 2016

Roberto Carlos Que sera de ti



Esta canción fue escrita por Roberto Carlos para su álbum “Roberto Carlos” de 1972 y fue un gran éxito en Brasil y toda Sudamérica.

Caetano Veloso- Un vestido y un amor



Historia de la Canción
Fito Páez conoció personalmente a la actriz argentina Cecilia Roth en 1991. Cecilia, que en la época vivía en España, había vuelto a la Argentina para recuperarse de las secuelas de una hepatitis. Fito Páez, siete años menor, era considerado el joven prodigio del rock argentino. Estaban en Punta del Este, en una fiesta de disfraces, cuando él le pidió a Cecilia que le sirviera una copa de vino. Cecilia en aquel momento era una mujer casada, o sea, ya tenía "un vestido y un amor".
Poco tiempo después, Cecilia había roto su compromiso, en la misma época que Fito. Ambos estaban con el corazón partido y juntos los corazones se recuperaron. Así surgieron las "margaritas del mantel", como Fito declaró en una entrevista 20 años después.
Fito fue al apartamento de Cecilia, encendió un cigarrillo, se sentó al piano del hermano de Cecilia, que estaba en un costado del apartamento, y creó la canción. Se casaron en 1999.

Análisis de la letra
La letra relata la admiración de un lírico al encontrar su musa inspiradora, sin saber si era un ángel o un rubí.
Las sensaciones que Fito relata al ver su musa, saliendo entre la gente a saludar, fumando drogas en Madrid, reflejan la luminosidad, como si aquella visión iluminara el día, la carretera, la vida de la persona amada.
Justamente cuando él no buscaba a nadie, vio a su musa, que ya tenía "un vestido y un amor".
En Brasil, fue grabada con enorme éxito por Caetano Veloso en el álbum Fina estampa9  de 1994 con un arreglo más lento marcado por el violonchelo de Jacques Morelenbaum.


Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/Un_vestido_y_un_amor

viernes, 21 de octubre de 2016

Demis Roussos - Morir al lado de mi amor




El cantante Demis Roussos, nacido en Alejandría, comenzó su vida artística siendo el bajista y vocalista de la banda de rock Aphrodite’s Child. Allí comienza la relación con el tecladista Vangelis, quien luego sería el compositor de la mayoría de sus éxitos en su carrera como solista.
Con su inconfundible timbre de voz, ha vendido más de 40 millones de álbumes en todo el mundo. Ha cantado en varios idiomas, entre ellos el francés, el inglés, el español y el alemán. Algunas de sus más famosas canciones son “Romántica”, “Un Mundo de Hombres Niños”, “Mañanas de Terciopelo”, “Canción de Boda”, “Perdóname”, entre otras.
Murió a los 68 años el 25 de enero del 2015 víctima de un cáncer estomacal.


Fuente: http://www.elreporte.com.uy/demis-roussos-morir-al-lado-de-mi-amor/

QUIEN ERES TU





De qué espacio sideral desconocido,
de qué tiempo que ya fue o aún no ha sido,
de qué lluvia de planetas has caído
proclamando un "aquí estoy porque he venido"...
Que aunque no se trate de pedir permiso
por pisar el mismo vértigo que piso,
no se apunta a un corazón sin previo aviso
tan de pronto y disparando tan preciso...

Quién eres tú...
Quién eres tú,
Prodigio o vudú...
Quién eres tú
ensueño o tabú...
quién eres tú...

Cuando ya no queda más que ese momento
en que comienza a repetirse el argumento,
apareces de repente, con el cuento
de que no hay historias... sólo sentimientos
y me invades con palabras como besos
inundándome con pájaros, los sesos
Qué difícil intentar salir ilesos
de esta magia en la que nos hallamos presos...

Te aseguro que no quiero hacerme el fuerte,
en todo caso me da pánico creerte...
No sé si eres el presagio de la Suerte
o, al contrario, vienes a darme la muerte
pero seas agua turbia o aguanieve,
cómo no beber cuando me dices: "bebe"...
que la sed se va apagando y es más breve
al tiempo que pasan los años... y no llueve

Luis Eduardo Aute es un cantautor, pintor, escultor y director de cine español. Es el creador de temas inigualables como “Rosas en el mar”, “De alguna manera”, “Aleluya”,  ”La belleza” y muchos más. En cantante se encuentra en coma, en el hospital después de sufrir de un infarto.
En una entrevista de ABC declaro lo que lo pinta como un genuino artista:

“Yo quiero que escuchen mis canciones, vean mis cuadros y escuchen mis poemas, pero a mí que me olviden. Quiero que disfruten o padezcan mi trabajo, el autor es lo de menos.”

jueves, 20 de octubre de 2016

DEBORAH PALFREY



El asesinato ha sido a través de la historia un medio de eliminar un enemigo o una amenaza de carácter político y/o económico. Esto era muy común en el Imperio Romano. Esta práctica se ha trasladado a los tiempos modernos donde los estados de las naciones modernas, sus organismos de control de la población y sus instituciones policiales y políticas eliminan físicamente peligros para lo que consideran su seguridad o en última instancia sus intereses. Se habla de que John Kennedy, Martin Luther King y Robert Kennedy fueron asesinados por estos motivos. Últimamente parece que ya no se necesita eliminar violentamente a esas amenazas, el suicidio o mejor dicho el aparente suicidio es la forma como estas personas peligrosas dejan este mundo. Estos “suicidios” se han facilitados por el avance de la quimica y el uso de material radiactivo que no deja rastros en el cuerpo del occiso.
Un caso de suicidio envolvió una actividad escandalosa en la sociedad estadounidense: la prostitución.
Deborah Palfrey dueña de una empresa de acompañantes había sido acusada y juzgada por delito de montar una red de prostitución en las altas esferas de Washington DC. Deborah tenía una lista de prominentes líderes políticos, judiciales y policiales.  Por ejemplo, el señor Tobías había sido nombrado por el presidente Bush para combatir la prostitución a nivel mundial pero tuvo que renunciar luego de descubrirse que era un cliente asiduo de la compañía de acompañantes de Deborah Palfrey. Deborah amenazó con hacer pública la lista completa de sus miembros sino era absuelta de esos cargos. Deborah fue sentenciada a prisión y dos días antes de atestiguar sobre esa lista de clientes es encontrada muerta colgando de una viga en la casa de su madre en Florida. Dos meses antes había declarado en un reportaje radial que no se suicidaría y días antes reveló al dueño del condominio donde vivía que era seguida por camionetas y que tenía miedo por un contrato que habían hecho para acabar con su vida.
Las autoridades dictaminaron que Deborah Palfrey se había suicidado y se adueñaron de los documentos comprometedores. Su abogado declaro recientemente que la lista de Deborah podía influir en las elecciones presidenciales de este año pero estos documentos están sellados por ley y la corte suprema ha prohibido su divulgación.

Como corolario hay que decir que personas aparentemente inofensivas como los estudiosos de los OVNIs están cometiendo suicidios últimamente.

Cecilia VII




Sé que debería haberla olvidado y en la distancia debía haber sido fácil. Pero Cecilia había sido lo más obsesivo que había tenido en mi vida. Aunque llenaba mi cabeza de infinidad de cosas para distraerme, para agobiarme, todo intento había sido un fracaso porque siempre llegaba el momento en que me encontraba solo conmigo mismo, con mi soledad, con el vacío de mi alma. En ese instante mi ser reclamaba un bálsamo, una pócima de ilusión para existir, para seguir viviendo. En el último segundo de mi desesperanza, Cecilia me salvaba. Entonces ¿Cómo podría haberla olvidado?
Por eso estaba decidido a confesarle que la amaba pero no porque buscara una relación o un sentimiento reciproco. Creo que los sentimientos no se toman, se dan sin esperar un compromiso. Y esa era mi misión, ser bueno con ella, decirle que la amaba si esperar ninguna retribución.
El único problema era como decírselo, así, tan de pronto, después de tanto tiempo. Eso sonaría falso.
Pensé que sería buena idea enviarle un poema por su correo electrónico. Así lo hice.

¿Adónde van mis sentimientos?
los que emanan de mi pecho.
¿Se desvanecen acaso?
o se expanden como el aire.
¿Son acaso eternos
y existieron antes de mí?
¿o broto ahora y aquí?
¿Fuiste tú la razón
que los originó?
¿Entonces qué soy yo?
¿un enajenado
que sin querer
tenía que amarte
sin justificación?

Supuse que en dos o tres días tendría una respuesta. Esperé pero no llegó.
En la noche tuve un sueño. Andaba por una calle y en una esquina la vi dentro de un almacén. Vestía un suéter a rayas azules, blancas y rosadas. Me extrañe porque no era la ropa ni los colores que usualmente ella vestía. Entré y la vi acompañada por dos tipos. Seguía lo inusual.
-¿Qué escondes? Le pregunté.
-No escondo nada – Me contestó seria.
-¿Qué secreto guardas?
-No guardo nada.
Y me desperté. Había soñado con Cecilia.
Pasó más de una semana y como no obtuve respuesta decidí hablarle personalmente. Al día siguiente la busqué y la encontré en un centro comercial cerca de su casa.
-Hola Cecilia. Quiero hablar contigo.
Me miró fijamente un instante y me respondió.
-No tenemos nada de que hablar.
-Tienes que escucharme, es algo importante.
-No quiero escuchar nada.
-¿Qué ocultas? Le hice esa pregunta porque me acordé de mi sueño.
-No oculto nada.
-Sí, lo sé. Algo pasa entre los dos.
Quería escabullirse pero la había arrinconado.
-¿No te das cuenta?
-¿De qué?
-Ayer soñé contigo, lo que ahora está pasando. Usas la misma ropa que usabas en mi sueño.
-Creo que estás loco.
-Y hablamos las mismas cosas por eso sé que ocultas algo.
Se quedó callada.
-Pero eso no importa porque tengo que decirte algo.
-Dime, ¿Qué tienes que decirme?
En ese instante paso una señora que la conocía. Cecilia se ouso nerviosa y nos callamos. La saludó y se fue con ella.
¡Que desilusión! A punto estuve de confiarle mi secreto y se frustró.
Busqué otra oportunidad para hablar con ella pero no fue posible.  
Decidí  enviarle otro poema:

Nadie sabe la verdad
que talvez jamás intuirás.
Que un corazón se desangra,
para que entiendas
que alguien aún
te puede amar.

No sé por qué pero tuve temor de enviárselo pero recordé que el haber ocultado mis sentimientos me había hecho sufrir. Y la envié.
Al día siguiente me llama hermana.
-¿Qué has hecho?
-¿Hecho que?
-Le enviaste una carta a Cecilia.
-Sí, ¿Por qué?
-Su esposo la recibió.
-¡No!

Después de tantos años de indecisiones, de haber consumido mi adolescencia, mi juventud, escondiendo un sentimiento que estaba por revelar y cuando Cecilia había accedido a escucharme, todo se derrumbó

martes, 11 de octubre de 2016

Un profe en el Averno



¡Me fui al infierno! … literalmente, de verdad, a ese infierno de quemazón eterna.
Estaba haciendo mis horas de oficina cuando se me presento el diablo pidiéndome entrar.
-Pase. Le dije cortésmente.
No lo reconocí, pensé que era un colega.
-Siéntese, ¿en qué le puedo ayudar?
-Soy el diablo  y necesito que me ayude – me dijo con la voz de Lord Vader.
Yo le sonreí amablemente esperando que desmienta lo que había dicho con una sonora carcajada. Pero no, eso no ocurrió. Me miro profundamente esperando mi respuesta.
-Es usted un colega, ¿no? Claro que lo puedo ayudar pero no tiene que decir que es el diablo para que lo ayude.
-Soy el diablo y por lo visto no me cree. Veremos si me cree ahora.
Frente a mis ojos se transformó en la clásica figura del demonio con cacho y cola y tridente. Me quedé estupefacto.
-Talvez necesita otra prueba más contundente.
Y se transformó en la imagen de estampitas de Jesús con su túnica blanca y su cabello y barba castaños.
Pensé que me estaba hipnotizando y me dije ¡qué tal fuerza magnética! Así que el seguí el juego.
-Bueno, le creo. Entonces, ¿Cómo le ayudo?
-Tenemos una competencia allá abajo y necesitamos un juez para que la dirima.
- Jueces en el infierno no le faltara, ¿no? Aquí hay tantos corruptos y coimeros, abajo tendrá miles a su disposición.
-Por lo mismo que son malos jueces queremos que sea uno realmente imparcial.
Sonaba lógico. Tan lógico que estaba pensando que se había escapado del manicomio y que por mi mala suerte había aterrizado en mi oficina. Pero tenía que ser cauteloso, no vaya a ser que se irrite y reaccione violentamente, Así que al menor descuido busco ayuda.
-¿Me ayudara?
-Claro.
-¿Nos vamos?
-Después de usted- le dije
Instantáneamente me encontré en una enorme caverna oscura alumbrada por altas llamaradas de fuego. A lo lejos oí lamentos y gritos destemplados de gente sufriendo algún tormento. En ese momento se me fue la incredulidad. Me invadió un intenso pavor que me hizo perder las fuerzas y doblar las rodillas. Pensé que no saldría vivo de allí o que ya había muerto o que moriría allí. Me di cuenta que esas ideas era lo que me causaba pavor, así que las aleje de mi mente y me concentré en lo que veía.
-Sígame – me ordenó el diablo.
Fuimos caminando por un estrecho sendero con escaleras que descendían a enormes fosas. De allí surgían los gritos de dolor. Atisbé por el filo del sendero y vi gente abrazada por llamas de fuego que no la carbonizaba pero si continuaban asándola.
-¿Por qué me eligieron a mí, un simple profesor, habiendo abogados, juristas, científicos?
-No es que todos los profesores sean unos “santos” pero como grupo son los más honestos.
Era cierto. Cuando eche una mirada a una fosa vi muchos abogados, jueces, policías, expresidentes, doctores y hasta mecánicos de autos. Ministros y congresistas habían por miles pero vi pocos profesores. Entre esos pocos estaba Lincoln Arrunátegui, profesor de la escuela de mujeres ‘Virgen de la Asunción” quien había sido denunciado por tener relaciones con varias estudiantes. Obviamente la autoridad educativa debía de haberlo denunciado penalmente pero solo lo sancionó enviándolo a trabajar a una escuela del interior. Y lo peor es que no era la primera vez que había sido acusado por lo mismo. También vi a un director de una unidad educativa, Diógenes Lovato, a quien acudían jóvenes profesoras para pedirle trabajo y él las citaba en su oficina particular, en un hotel camino a San Antonio.
Después de andar unos minutos bajamos a una explanada. En el centro estaban dos grupos de diablos sentado en unos escaños de piedra. Alrededor había un público que apenas me vieron empezaron a hinchar por su equipo.
EL guía me presento al líder del grupo, un tal Asmodeus quien tenía en sus filas a diablos disfrazados de los peores Papas de la historia como el Papa Sergio III, Benedicto IX, Bonifacio VIII, Sixto IV e Inocencio VIII. El otro grupo estaba encabezado por un tal Balaam y conformado por los líderes más corruptos de la historia como Calígula, Hitler, Mussolini, Francisco Franco, Duvalier, Nixon, Bush y otros más.
La competencia consistía en pruebas difíciles de realizar por un demonio:
1. Convencer que cinco hombres y mujeres con comportamiento sexual compulsivo se aparten del vicio de la lujuria.
2. Hacer que diez glotones dejen el vicio de la gula.
3. Persuadir a diez dueños de corporaciones que dejen de ser avaros
4. Transformar a diez burócratas en buenos trabajadores
Si hubiera un empate se dirimiría con la quinta prueba:
5. Lograr que diez políticos tradicionales dejen sus intereses particulares y partidarios y trabajen armoniosamente.

Rogué que no sea necesario llegar hasta la última prueba porque ni Dios la podría realizar.

domingo, 9 de octubre de 2016

Cecilia VI



¿Cuándo sabemos que amamos a una persona?
Muchas veces me había preguntado qué realmente sentía por Cecilia. Yo me sentía enamorado. Sentía que quería estar con ella, hablar, caminar con ella, porque sentía que eso me daba alegría. Me sentía enamorado porque pensaba en Cecilia más de cien veces al día, desde que despertaba hasta que me dormía. Sentía placer imaginándome con ella pero sufría por no tenerla, sufría por no poder estar con ella. Mi mente estaba fuera de control,  mi razón giraba alrededor de Cecilia. Ella se había convertido en una necesidad, en una suerte de adicción que tenía que consumir para ser feliz.
Pero eso no era todo lo que sentía por ella, yo quería verla feliz, que no tuviera problemas que hicieran preocuparle. También me interesaba que este bien, que no tenga ningún problema de salud. No me hubiera gustado saber que sufría por alguna enfermedad.
¿Y qué de su cuerpo? No pensaba en ello aunque no quería decir que no me gustara físicamente. Pero sí, me atraía, pero más que todo porque era el cuerpo de ella, con todas sus formas, todos sus encantos, todas sus gracias. No me hubiera importado si me hubieran dicho que era o no era bonita, para mí lo era.
Si, absolutamente me hubiera gustado estar con Cecilia, disfrutar de su compañía, ser su compañero y poder llamarla mi amor. Seguramente que no todo hubiera sido felicidad porque todos tenemos nuestras imperfecciones. Pero no me hubiera arrepentido de estar con ella porque tuviera defectos. Pienso que la hubiera comprendido con todo el amor  y por todo el amor que le tengo.
Todo estaba claro para mí. Mis sentimientos eran sinceros y verdaderos. Ya sabía porque estaba fija mi mente en Cecilia y porque tenía que amarla en esta vida.
Pero nadie más sabía esto. Y lo peor es ¿me creería Cecilia? Me ponía en su lugar o de cualquier persona que escuchara la historia que me dijo la gitana… inmediatamente me tildaría de loco. Prácticamente me tomaría como tonto, un idiota o un vivo que invento algo absurdo para salirse con la suya.

Mas tenía que acercarme a Cecilia y decirle que la amaba, que la quería desde el primer momento que la vi, desde el primer momento que puse mis ojos en ella, que algo se encendía en mi cada vez que veía su sonrisa y que a pesar de los años transcurridos y los que pudieran venir, siempre pensaría en ella y que nunca la olvidaría. Y lo más importante que debía de saber es que alguien en este mundo la podía querer solamente por existir.

viernes, 7 de octubre de 2016

Take a bow-Madonna




Se cree que esta canción traduce un romance fallido de Madonna con una estrella de cine. Se comentaba que se trataba  de Warren Beatty. También se dijo que era Antonio Banderas. Pero se cree que fue Sean Penn con quien Madonna se casó y con el cual tuvo un romance tumultuoso. Madonna consideraba a Sean Penn como el amor de su vida.

En el video original aparece el torero español Emilio Muñoz quien hace el papel de amante de Madonna. 

miércoles, 5 de octubre de 2016

Cecilia -V-


Había cumplido 42 años y me encontraba solo, sin pareja. De hecho había decidido no casarme ni tener hijos. No quería casarme porque sabía que los sentimientos son cambiantes y muchas veces no son recíprocos. No quería tener hijos porque es una gran fuente de problemas. La verdad era que temía sufrir por esas dos causas.
            Estaba solo pero estaba en contacto con Cecilia… indirectamente. Ella y mi hermana se habían hecho buenas amigas. Las dos tenían la misma edad, estaba casadas y tenían ambas dos hijos. Así que cuando hablaba con mi hermana me decía que fíjate que Cecilia esto y aquello, que se ha mudado, que sus hijos están grandecitos, etc. Yo fingía que la escuchaba sin mucha atención aunque “paraba bien la oreja” para enterarme de cualquier detalle. De hecho esos detalles animaban mi tranquila y rutinaria vida. Aunque en mi existencia había tenido muchas cosas buenas, exuberantes y alegres y algunas un tanto tristes, erradas y penosas, adolecía del amor, del amor de mi vida, del amor de Cecilia.
            Fácil sería decir que lo que yo sentía era solo una obsesión. Pero era mucho más que eso. Y es que cuando pensaba en ella, cuando recreaba en mi mente el momento cuando la vi, donde la vi, como la vi, que le dije, que me dijo, que hicimos, algo se encendía en mi cerebro que me volvía animoso, sentía más confianza, me sentía más vivo. Era como si sintiera una suerte de placer mental cuando me envolvía en pensamientos y sentimientos sobre Cecilia. Claro que todo eso no era real porque no existía en el mundo físico pero si en mi cabeza que lo aceptaba como real. Pero ¿Qué es la realidad? ¿No es acaso, en última instancia lo que sentimos? Un paisaje causa alegría a algunos pero tristeza a otros aunque todos admitan que ven los árboles, la pradera y el cielo azul.
Una noche tuve un sueño. Soñé que estaba en una casa grande de madera. Yo era un sirviente que vestía una ropa simple de la edad media. La dueña del señorío me llamó.  Tomaba un baño caliente en una tinaja de madera. El cuarto de baño era grande y separada del resto de la casa por una gran cortina oscura.
-Sécame los pies – me ordenó
Deslizo un pie por entre las cortinas y lo sequé con un paño blanco. Luego le sequé el otro. Después corrió la cortina y sonriéndome salió envuelta en una gran manta blanca. Desperté y reconocí el  rostro que vi en mi sueño. Tenía otro cuerpo, otro rostro, otra piel, más en mis adentros sabía que era Cecilia.
            Quise averiguar que significaba ese sueño y fui a ver a una gitana.
-Tú conoces a esa mujer. Te has encontrado con ella antes, en otra vida.  Tú eras su siervo y ella tu dueña pero aun así te quiso, fue buena contigo y cuido bien de ti. Ahora tienes que retribuir lo que recibiste.
-¿De qué manera?
-Tienes que amarla porque ella no sabe que es el amor.
-Pero…
-El amor podría estar frente a ella pero no lo vería porque no sabe lo que es.
-Pero yo…
-Y debes decirle que la amas aunque no te quiera escuchar,…
-Yo he tratado…
-… y aun cuando no te crea.
De pronto, lo que dijo la gitana inundo mi mente de una luz resplandeciente, como si hubiera descubierto una gran verdad.
-Porque ella sufre y necesita sentir que es amada.
-Eso no lo puedo hacer.
-No es lo que puedas o no puedas hacer, es lo que tienes que hacer.
Me fui, no quería escuchar más.

            Comprendí que tenía que hablar con Cecilia y decirle que la amaba aunque tuviera que romper el arca de la alianza en ese intento. 

                                                        MMK